Vinos Tintos

Clasificación del vino tinto​

El vino tinto se obtiene del prensado de la uva tinta, que le proporciona su característico color. Cuanto más tiempo esté el mosto en contacto con el hollejo de la uva, más intensa será su tonalidad. Según el tiempo de fermentación y envejecimiento, se clasifican en:

• Vino tinto joven: el tiempo entre la vendimia de la uva y su venta no supera los 4 meses. Se conocen también como “vinos del año” y su envejecimiento suele realizarse sobre todo en barricas, pero también en depósitos de hormigón o tinajas de barro.
• Vino tinto crianza: no se comercializa hasta que ha alcanzado 24 meses de vida, de los cuales al menos 6 deben ser en barrica. El resto del tiempo permanecerá en las botellas antes de su comercialización.
• Vino tinto reserva: por encima de su predecesor, el período total de envejecimiento debe ser de al menos 36 meses, con un mínimo de 12 meses de permanencia en barrica.
• Vino tinto gran reserva: el tiempo de fermentación total de este vino es de 60 meses, de los cuales al menos 16 deben de ser en barrica. Es el vino que mayor tiempo pasa en el proceso de fermentación y en el de envejecimiento.

¿Cuánto tiempo puede conservarse el vino tinto?

Depende, nuevamente de su clasificación:

• Si es joven, disfruta de un tiempo máximo de consumo recomendado de 2 años.
• El vino tinto crianza, sin embargo, puede extender su envejecimiento entre los 2 y 5 años una vez embotellado.
• Más tiempo se conserva el vino tinto reserva, que puede almacenarse durante 6 y 10 años.
• Por último, el vino tinto gran reserva se conserva de media unos 15 años, pero los de mayor calidad pueden llegar a aguantar óptimos durante décadas.